Origen de los árbitros de la revista Biological Conservation |
Los manuscritos que se envían a revistas científicas generalmente son evaluados por los llamados pares - o sea, gente que sabe del tema. Y está dispuesto a hacerlo - y allí empieza el problema. Los revisores o árbitros leen el manuscrito, deciden si el tema es interesante y es abordado de manera correcta, y hacen sugerencias para mejoras. También pueden decir que no tiene remedio, y sugerir un rechazo (cosa que nos pasa a tod@s). Es un trabajo con mucha responsabilidad, pero tedioso y poco reconocido (no se paga ni entra al currículum). Entonces, con todas las presiones que existen en la vida académica, es lógico que las revistas a veces tienen problemas para encontrar buenos árbitros que además hacen el trabajo dentro del tiempo estipulado.
La revista Biological Conservation publicó hace poco un análisis numérico de su proceso de evaluación. Si quieren leer el artículo, se tienen que apurar, porque todavía estará disponible libremente otros tres días, hasta el 21 de septiembre de 2017 (después lo pueden pedir a mí, si no tienen acceso).
Los autores del artículo buscaron patrones y querían ver si algunos factores digamos demográficos influyen en las revisiones. Por ejemplo, existen ideas que mujeres e investigadores jóvenes aceptan más a invitaciones de arbitraje, que los norteamericanos son más rápidos en hacerlos, y que hombres rechazan más manuscritos que mujeres.
Primero un dato que se debe considerar como autor: la revista Biological Conservation rechaza más de la mitad de los manuscritos recibidos sin siquiera enviarlo a revisión (más o menos 900 de los aproximadamente 1700 que recibe al año). De los 800 manuscritos sobrantes, aproximadamente la mitad, 400, se publican eventualmente.
Usaron datos de dos años y de casi 1600 manuscritos que enviaron a revisar. Se enviaron casi 12000 invitaciones a aproximadamente 6500 posibles revisores. De este universo se seleccionaron al azar 600 manuscritos y se trazó su camino. También obtuvieron datos sobre los revisores: cuándo publicaron su primer artículo, y cuántos publican en promedio al año.
¿Y qué encontraron?
- Revisores viven principalmente (60%) en países ricos de habla inglesa. Bueno, esto no sorprende.
- La mayoría de los revisores son hombres que publicaron su primer artículo en promedio 16 años atrás, o sea, son de media carrera. Mujeres solo representaban como un tercio de los revisores, y en promedio eran más jóvenes.
- Se aceptaron 37% de las invitaciones, así que un editor de la revista tiene que enviar, en promedio, 6.7 invitaciones para llegar a tener los dos revisiones que generalmente se requieren (en una ocasión un editor tuvo que enviar 24!! invitaciones).
- Había diferencias en las tasas de aceptación de invitaciones - entre los chinos, más que la mitad aceptaron, mientras los del norte de Europa eran particularmente renuentes. Los mexicanos andamos en medio.
Tasas de aceptación de invitaciones a revisar |
- Edad, género, o nivel académico no tuvieron influencias significativas sobre la tasa de aceptación.
- Es más probable que personas que aceptan una invitación, acepten otra.
- Las aceptaciones generalmente llegan rápidamente, en menos de una semana. Si es que llegan.
- Casi todos los que aceptan terminan las revisiones (92%), pero no había patrones geográficos o demográficos.
- Un poco más de la mitad de los árbitros terminaron su revisión hasta la fecha límite de tres semanas (56%); casi todos se terminaron después de seis semanas (con recordatorios). No había patrones geográficos. Como pueden ver en la gráfica, a todo el mundo les gusta hacer las cosas en el último momento:
Tiempo que se tardan los revisores en días. La línea roja indica la fecha límite de 21 días. |
Un punto que sale en la discusión del artículo es que editores utilizan mucho las herramientas como Google Scholar y Researchgate para encontrar árbitros.
Si quieren leer todo el artículo, aquí está la referencia:
Primack, R.B., Maron, M., Campos-Arceiz, A., 2017. Who are our reviewers and how do they review? The profile and work of Biological Conservation reviewers. Biological Conservation 211, 177–182. doi:10.1016/j.biocon.2016.11.039
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