jueves, 15 de noviembre de 2018

Un taller sobre redacción científica

La próxima semana, jueves y viernes, el Instituto Politécnico Nacional ofrece un taller sobre redacción científica que antoja interesante. La cuota es muy módica, de 235 pesos - es básicamente para el café y la constancia. Pero, para algunos será algo difícil llegar, dado que se llevará a cabo en el CEPROBI en Morelos. Para más información pueden escribir a kbermudes@ipn.mx o hablar al teléfono 55-5729-6000 Ext. 8252.

Abajo vienen los detalles; hagan clic sobre la imagen para verlo en grande.



martes, 13 de noviembre de 2018

Galápagos: la vegetación

Las islas Galápagos son unos pedacitos de tierra, lejos, lejos en el océano Pacífico, ubicados sobre el ecuador. Son realmente partes de una sierra volcánica marina, nada mas las cimas que salen del agua. Las montañas no tienen la misma edad: nacieron poco a poco, en las orillas de dos placas en movimiento lento, que originaron los volcanes que se volvieron islas.



La distancia a tierra firme (casi mil kilómetros) u otras islas, y también las distancias entre las islas del archipiélago, hacen que eventos de colonización eran muy, pero muy raras. Una que otra semilla flotante muy resistente, o un insecto desviado con vientos de huracán quizás, o una plantita flotando por meses en una balsa formado por un tronco de árbol.

Entonces, aquellas pocas plantas y animales que sí llegaban, a menudo encontraron nuevas oportunidades: poca competencia y muchos recursos, otorgados por tierras rocosas, pero fértiles, y la corriente fría de Humboldt, cargada de peces. Entonces, empezaron a seleccionarse según las condiciones del lugar - y, poco a poco, cambiar su forma de vida, y con esto, la forma de su cuerpo, sus colores o sus tamaños. En islas, a menudo encontramos formas gigantescas o minúsculas de grupos de seres vivos. Como resultó este proceso en estas islas, les platicaré más adelante.

Las islas de Galápagos tienen formas diferentes: algunas son relativamente bajitas. Allí los vientos alisios pasan, pero no dejan mucha humedad. Otras islas tienen pequeñas o grandes cerros (el más alto tiene alrededor de 1700 m); allí sí se condensa la humedad de los vientos, hay mucha neblina y llueve. Son sobre todo los lados sur que se visten más de verde.

La isla San Cristobal, vista desde el mar. Se observan las típicas formaciones de origen volcánico.

Entonces, la mayor parte de las islas está cubierto por lo que llamamos en México una selva baja, o quizas bosque tropical subcaducifolio, ya que algunos árboles se mantienen verdes durante la temporada seca, de junio a diciembre. Hay, por ejemplo, especies de Bursera, leguminosas y cactos. En una de mis próximas contribuciones hablaré sobre algunas especies que llaman la atención.

Esto es la vegetación cerca del aeropuerto de Puerto Baqueritos, en la isla San Cristobal


Bosques secos con varios tipos de cactáceas

Las partes más húmedas actualmente son usadas principalmente por agricultura y ganadería. Si, hay partes completamente transformados por humanos - viven alrededor de 25,000 personas en las islas. La mayoría trabaja alrededor del turismo, pero también en actividades primarias. Estas partes de las islas se parecen a, digamos, las partes bajas de Veracruz.


Vista desde el Junco, un área natural y cerro en la isla San Cristobal. En frente una finca particular, en el fondo el bosque tropical seco, que es área protegida.

Un rancho con ganado en San Cristobal

Una plantación tropical mixta

Aparte de bosques tropicales bajos, también hay algunos pequeños manglares, vegetación de dunas y vegetación de malpaís, dado que partes de las islas tienen flujos de lava recientes. Además, tiene algunas formas de vegetación muy especiales, que serán el tema de otra contribución.

Un malpais o reciente flujo de lava en Santa Cruz.

Se observan formaciones de basalto con un manglar

Una vieja conocida habita las dunas: Sesuvium portulacastrum, la verdolaga de playa


Mas mangles - y observen quién está disfrutando la sombra en el lado derecho

Para leer más:

Huttel, C. (1986). Zonificación bioclimatológica y formaciones vegetales en las Islas Galápagos. Cultura: Revista del Banco Central del Ecuador, 8(24a), 221-233.

miércoles, 7 de noviembre de 2018

Aves en el Metro

Me acabo de enterar de esta exposición, y ya casi termina. No es de plantas, pero les va a interesar:

Foto tomado de la página Facebook de la Conabio

En el anuncio de esta exposición sobre los aves de la Ciudad de México dice que está en la estación de metro Zócalo, aunque supongo que se encuentra realmente en el pasillo subterráneo entre Zócalo y Piño Suárez. Termina el 19 de noviembre de 2018.

miércoles, 31 de octubre de 2018

jueves, 25 de octubre de 2018

Guias para plantas de Ecuador


La sección "Recursos" de la página web del XXII Congreso Latinoamericano de Botánica contiene varios enlaces a documentos útiles para botánicos.

Por ejemplo, incluye una sinopsis de los datos de los diferentes herbarios de aquel país. Y ya se pueden bajar las memorias del congreso (pero cuidado - ¡son casi 700 páginas y más de 100 megas!).

En esta sección, acabo de descubrir un pequeño trabajo muy bonito (y que debemos tomar como ejemplo para otros países), obra de Carmen Ulloa. Es una presentación que ofrece una gran cantidad de enlaces a diferentes guías y manuales, útiles para botánicos.

Vayan a explorarlo. Aquí va la portada y dos de las páginas como ejemplo:




miércoles, 24 de octubre de 2018

Manuales de malezas para Ecuador

En el actual XII Congreso Latinoamericano de Botánica se presentó un nuevo manual de malezas para los cultivos más importantes de Ecuador, el país anfitrión. Cubre a 93 especies; la mayoría también las conocemos en México.


Aquí como ejemplo, el tratamiento de Cenchrus echinatus, el codillo:



Indagando un poco más, encontré todavía otro manual, ahora de las malezas e invasoras de las Islas Galápagos. Cubre a 31 especies.


Y como ejemplo, una especie que también nos da muchos problemas en México, Bryophyllum pinnatum (= Kalanchoe pinnata):


Ambas publicaciones están orientadas principalmente al combate, pero, claro, también sirven para la identificación.


Referencias

Fundación Charles Darwin y Servicio Parque Nacional Galápagos (2006). Manual de Identificación y Manejo de Malezas. Fundación Charles Darwin, Quito.

Santillán, M. (2017). Manual de malezas presentes en cultivos de importancia económica del Ecuador. Agrocalidad. Quito, Ecuador. (tarda, es un archivo grande)

martes, 23 de octubre de 2018

Visitantes florales en plantas arvenses mexicanas


Una milpa colorida; para ver más: Que bonito está la milpa
Recientemente, las noticias han estado llenos de malas noticias sobre el estado de la fauna polinizadora, principalmente insectos. Es muy importante reconocer a este grupo de animales (aunque en lo personal quizás no les caigan tan bien) como una parte importante de la naturaleza que nos rodea y que también nos da servicios importantes. En este contexto, quizas debemos valorar adecuadamente el papel de estas plantas silvestres en nuestro paisaje que mal-llamamos malezas.

La plática que presenté ayer en el XXII Congreso Latinoamericano de Botánica en Quito, fue sobre el tema. La primera autora, Valeria Hernández Villa, quien se graduó de su maestría el año pasado, observó visitantes a 10 especies de arvenses importantes, e indagó sobre la produccion de semillas con y sin presencia de animales con experimentos de embolsamiento. Encontramos que las especies, al parecer, se sortean por una combinación de altura y requerimiento de polinizadores.

Aquí les dejo el resumen.

Visitantes florales y sistemas de reproducción de plantas arvenses de maíz en el centro de México

Valeria Hernández-Villa, Heike Vibrans, Ebandro Uscanga-Mortera y Armando Aguirre-Jaimes

El cultivo del maíz en Mesoamérica posee una flora arvense muy diversa con una alta proporción de especies nativas. Muchas de estas especies tienen flores vistosas, que probablemente son polinizadas por animales, mientras que las arvenses del Viejo Mundo se autopolinizan o son polinizadas por el viento.

Para explorar la ecología de la reproducción de la flora arvense mesoamericana, se estudiaron los visitantes florales y sistemas de reproducción de plantas arvenses en el cultivo del maíz en dos sitios del municipio de Texcoco, México. En cinco arvenses comunes y nativas se determinó su sistema de reproducción (autógamo obligado o facultativo/alógamo obligado) con embolsamiento/polinización abierta, tipos de visitantes florales, y altura promedio de la planta. Los resultados se analizaron con ANDEVAS y pruebas de Tukey.

Se encontraron tres especies preferentemente alógamas que eran de porte alto, dos autógamas obligadas de porte bajo, y cinco autógamas facultativas, de porte medio. Solo 8 de las 10 especies (las altas y las medianas) recibieron visitas. Estas visitas fueron de diferentes grupos taxonómicos de insectos, indicando que estas arvenses son generalistas; sin embargo, cada especie tenía su propio grupo de visitantes.

Hubo una relación marcada y altamente significativa entre el número de visitas y la altura: a mayor altura había un mayor número de visitas. También hubo una diferencia entre los dos sitios: en el sitio más rural había más visitantes y más especies obligadamente alógamas que en el sitio con mayor cercanía a centros urbanos (campos experimentales de una institución de investigación agrícola).

Se encontró un número relativamente alto de especies obligadamente alógamas, comparado con otras floras arvenses, y parece que existe una relación muy cercana entre accesibilidad (altura) y el número de visitas.

Problemas de tráfico sobre un acahualillo, Simsia amplexicaulis

lunes, 22 de octubre de 2018

Construyendo el árbol de la vida

El viernes pasado hablé de un cartel que reflejaba la filogenia de las plantas con flor. Esta contribución resultó muy popular, juzgando por el número de visitantes. Entonces, quiero aprovechar la oportunidad para llamar la atención a un número especial del American Journal of Botany que salió hace medio año. El tema era "Usando y navegando el árbol de la vida vegetal". La gran mayoría de los artículos son de libre acceso.

El número enfoca en el papel de las duplicaciones de genomas en la evolución de diferentes grupos de plantas, pero también trata temas como la filogenia de los organelos (algunos de los cuales tienen ADN que no es nuclear y se hereda solo de la madre), la hibridación y la transferencia lateral de material genético. También se examina la evolución de algunos rasgos, como la formación de superficies cerosas en Asclepias. Algunos artículos versan sobre métodos y muestreo.

Y la cereza en el pastel: vamos a poder escuchar a dos de los autores principales de varios de los artículos, Pamela y Doug Soltis, el próximo viernes. Ellos cerrarán con su conferencia el XXII Congreso Latinoamericano de Botánica, que hoy tuvo su primer día completo en Quito, Ecuador.

viernes, 19 de octubre de 2018

Toda la filogenia en un solo cartel

Un grupo de botánicos europeos ha producido un cartel que muestra las relaciones filogenéticas (o sea, de parentesco) de las angiospermas (plantas con flor) según APG IV, así como las características más importantes que distinguen a los grupos. Está muy bonito. La versión abajo es reducida. Pueden bajar el original aquí, que es para imprimir un cartel de 120 x 85 cm, aproximadamente.


La filogenia de las angiospermas

jueves, 18 de octubre de 2018

Fisiología vegetal, nopales y magueyes

La próxima semana se llevarán a cabo dos eventos que posiblemente sean de interés para los lectores de Jehuite. Para ambos ya pasó la fecha para enviar trabajos, pero todavía se puede asistir.

Del 24-26 de octubre de 2018 (miercoles a viernes) se organizó el 1er Congreso Mexicano de Fisiología Vegetal en el Colegio de Postgraduados. Parece que no tiene costo para estudiantes, pero solicitan que uno se registre previamente. Ya está el programa general; participan varios colegas del Posgrado en Botánica, y hay toda una serie de conferencias bastante interesantes.




Además, la Facultad de Agronomía de la Universidad Autónoma de Nuevo León en Monterrey es el escenario de un Simposio-Taller sobre Nopal y Maguey, el 25 y 26 de octubre, jueves y viernes. Tampoco está muy caro (400 pesos para estudiantes). El programa está orientado principalmente a la agronomía y el aprovechamiento, pero también hay algunas conferencias sobre temas biológicos.


miércoles, 17 de octubre de 2018

¿Sabes cómo reconocer una selva tropical?

El Jardín Zoobotánico de la Amazonia, visto desde la calle.

Hace dos meses fui a Brasil, por primera vez en mi vida, a un congreso en Belém. Esta ciudad está ubicada sobre una a las ramas del delta del Amazonas.

Parte del delta del Amazonas, cerca de Belém

No me quedé mucho tiempo, pero sí participé en un pequeño tour a los alrededores, para ver selva. Era una selva ya algo degradada, pero en fin, algo es algo. Ademas, la ciudad tenía una curiosidad: un manchón de selva en medio del mar urbano, que había sobrevivido por unos azares de la historia: el bosque Rodrigues Alves, ahora el Jardín Zoobotánico de la Amazonia, completo con algunos changos.

Tomé muchas fotos, por supuesto. El aspecto general de estas (semi)selvas era muy parecido a las selvas que tenemos en México, en Chiapas o Las Tuxtlas. Claro, las especies son parcialmente diferentes. Pero, muchas de las características típicas de una selva alta, selva perennifolia, bosque tropical húmedo o como quieren llamarle, sí estaban.

A continuación les voy a explicar cómo se puede distinguir una selva alta de un bosque mesófilo o de niebla, que es el tipo de vegetación más parecido.

Una regla de los bosques húmedos tropicales en general es que tienen muchas epífitas, o sea, plantas que usan los árboles como base; cada árbol es todo en ecosistema. En el bosque mesófilo o de niebla, estos son en gran parte orquídeas, musgos y helechos. Estos también hay en las selvas altas, pero hay mucho más Araceae (la familia del alcatraz y de la piñanona), y también algunos cactus:

Cada árbol es un mundo.

Una arácea somo epífita.

Lo que cuelga de este árbol y parecen heno son plantas epífitas del género Rhipsalis, una cactácea.

En el sotobosque hay muchas palmeras (en el bosque mesófilo son más helechos arborescentes):

El nivel inferior de la selva con varias palmeras
El estrato inferior consiste de plantas leñosas; casi no hay hierbas, y pastos menos.

Sotobosque de la selva

Hay muchas trepadoras y enredaderas leñosas (son menos en el bosque mesófilo; en las selvas bajas son más anuales o los que salen cada año):


Lianas leñosas

Las hojas adquieren, con el tiempo, una capa de líquenes y a veces musgos:



Los árboles más grandes ostentan contrafuertes gigantescos. Ayudan para estabilizar el árbol. Si hacen clic en la foto, pueden distinguir a una persona en el segundo árbol, a la izquierda, para comparación. Estos contrafuertes casi no hay en bosques mesófilos.



Contrafuertes de los árboles tropicales grandes.
Además, las raíces son  muy superficiales.


Lo que parece un tronco caído es una raíz del árbol de la foto superior.
Había dos características de estas selvas que no había visto en México. La primera era el suelo arenoso (y por lo tanto muy pobre) y el segundo eran termiteros sobre la tierra:


El suelo arenoso en las selvas de los alrededores de Belém.

Termitero epigeo

La selva en los alrededores de Belém, desde el avión