Un paraíso botánico

Vista del paisaje de Malinalco, Estado de México.

En la última visita, el mismo 23 de agosto, regresamos a Malinalco por la noche, y con la amabilidad del cuidador del convento, quien nos dejó entrar después de las horas normales, pudimos visitar un sitio que habia querido ver desde hace años: el patio del ex-Convento Agustino, sito en el centro del pueblo. Es un lugar muy especial, sobre todo para botánicos: un paraíso.

El patio del ex-Convento Agustino del Divino Salvador, en Malinalco

Este antiguo Convento Agustino del Divino Salvador, de la Transfiguración o de San Cristóbal (tuvo varios nombres a lo largo de su historia), se fundó en Malinalco en 1540; su construcción duró decenios. Probablemente en los años 1570 se elaboraron la mayoría de los frescos del patio, posiblemente con la influencia y apoyo del protomédico de las Indias, Francisco Hernández. Trabajaron varios artistas nativos basados en la pintura europea y en la indígena, con afinidad hacia algunas ilustraciones del Códice Florentino, y con estilos algo distintos pero geniales para la época.

Los frescos representan abundancia de diferentes plantas y animales, y cubren los pasíllos y la bóveda del claustro. Los primeros investigadores, sobre todo Jeanette Peterson (1993), los llamó jardines del paraíso.























Las decoraciones desaparecieron varios siglos bajo capas de cal, pero fueron descubiertas durante trabajos de conservación entre 1974 y 1984. Se hizo una remodelación completa entre 2002 y 2003 y realmente son obra para admirar.

En este mural se distinguen, de izquierda a derecha, un cactus alto (Pachycereus o Stenocereus), un arbusto de cacaloxóchitl (Plumeria), un nopal (Opuntia) y un árbol de guayaba (Psidium), más una variedad de magueyes, pastos y hierbas.

Los murales también incluyen plantas de origen europeo, como esta vid.

Con pocas líneas los artistas supieron dar la forma característica a muchas plantas. La enredadera es claramente una convolvulácea, probablemente Turbina corymbosa, una planta alucinógena.

Por todos lados se reprodujo en el retablo pétreo la convivencia de los animales con sus plantas: un conejito comiendo guayabas o pictóricas garzas entre plantas acuáticas, unas ninfas (Nymphaea):

¿Y no son encantadores estos changuitos comiendo frutos del cacao?

En 2005, la Universidad Autónoma del Estado de México editó una obra ilustrada sobre este recinto, por Laura White y Carmen Zepeda. Está basado en trabajos anteriores, con una introducción informativa. El libro (me lo regalaron), debe estar disponible en la biblioteca o librería de la UAEM, en Toluca; también se puede consultar un artículo acompañante, publicado recientemente en Polibotánica. Aquí está la portada, la página del contenido, una página de la introducción y la parte sobre especies particulares, así como las ilustraciones panorámicas del anexo:





Literatura citada:
Peterson, J. F., 1993. The Paradise Garden Murals of Malinalco. University of Austin Press, Austin, Texas, EUA. 224 p.
White Olascoaga, L. y C. Zepeda Gómez, 2005. El Paraíso Botánico del Convento de Malinalco, Estado de México. Universidad Autónoma del Estado de México, Toluca. 137 p. más anexos.
Zepeda Gómez, C. y L. White Olascoaga, 2008. Herbolaria y pintura mural: Plantas medicinales en los murales del Convento del Divino Salvador en Malinalco, Estado de México. Polibotánica 25: 173-199.

Si les interesa el arte botánico, vean también "Una galería de arte botánico". Las contribuciones anteriores sobre la región de Malinalco son "¿Qué nombre común para esta maleza tropical importante?", "El mastuerzo, Tropaeolum majus, como planta invasora", "Dahlias!" y "Otra visita a Malinalco".